Los handymans son lentos y tienen la tetrica facultad de encontrar pequeños defectos extra que es mejor reparar de una vez antes que esperar un par de meses a que estando instalada se me vengan encima, por esto es que sigo con el proyecto en marcha pero es una marcha a cuentagotas: Yaaa caaasiiii queeeedaaaa laaaaa eeeennntrraaaaadaaaaaaa (lease en camara lenta). Por ahorita me esta apoyando muchisimo uno de los licenciados que me paso una carterita de clientes, me esta dando asilo politico en su oficina super buen rollo, hasta me paso llave y me dice todos los dias que no me desespere, que no me deprima, que las cosas son asi y aunque suene medio tonto yo me siento mejor cuando me dice todo eso. Bah, me siento mejor cuando cualquier persona me dice que todo mejorará, al grado que en estos dias me levanto y le digo a mi espejo que todo mejorará y cuando me veo reflejada en alguna superficie me lo repito de nuevo como loquita y cuando me voy a dormir trato de no pensar en la rapidez con la que se desvanecen mis ahorros sino en lo linda que me va a quedar la oficina gracias a esos ahorros. Bendito Paris al que no ire pronto, pero que fue el pretexto para no gastarme el dinero que ahora me permite hacerme algo decente!
.
Dado el estado de las cosas tengo bastante tiempo libre: por las mañanas algo surge siempre y me voy a la oficina prestada, como son vacaciones del Tribunal el lic casi nunca esta o va un ratito asi que me deja ahi sola con la secretaria y cerca de la 1 de la tarde me quedo sin que hacer, vengo a casa a prepararme algo ligero de comer y voy a presionar a mis handymans que no me hacen ningun caso pero yo de todas formas voy a joderles un ratito, de algo ha de servir. De ahi estuve vagabundeando, a veces sali con alguna amiga y eso, hasta el domingo pasado que me encontre con el mejor cadaver de mi closet. El instructor.
.
Es casi increible como habia dejado de pensar en el y en E y en cualquier hombre, es esclarecedor como mi crisis economica sepultó (al menos momentaneamente) mis dramas amoriles. Recuerdo vagamente la piramide de las necesidades del hombre, aquella que nos hacian memorizar en las clases de "ciencia y tecnologia" de la escuela secundaria, y por fin la entiendo. Lo primero y mas importante es tener un techo, comida y vestimenta (por ende, un trabajo que nos lo sustente). Cuando eso falla, el resto de las necesidades simplemente quedan suspendidas, o al menos no les prestamos tanta atencion. Esto me pasó por la cabeza durante los 4 primeros segundos en que lo vi, despues se me olvidaron las clases y me di cuenta que mi pequeño corazon no habia muerto de inanicion y cuanto gusto me daba volver a ver a ese lindo trasero al que probablemente le rompi el corazon con mis indecisiones y evasiones.
.
Nos quedamos conversando un rato de como siguieron nuestras vidas en estos meses que nos dejamos de ver, trate de verme lo mas positiva que pude pero no logre engañarlo demasiado. Nos despedimos y pense que habia sido uno de esos encuentros lindos que se tienen con las buenas personas que han pasado por nuestras vidas y que nos hacen sentir que lo malo que haya pasado simplemente ya no importa mas, que ahora seriamos esa especie de buenos amigos que no se visitan ni se buscan pero que si se encuentran por la calle se quedan a conversar unos minutos y dejan un buen sabor de boca.
.
Pero en ese sano y maduro razonamiento olvide el pequeño detalle de quien es el. Es el instructor. El hombre que hace las A de triangulito. El que hace apenas pocos meses pretendia convertirme en su esposa y en la madre de sus futuros instructorsitos. Me fue imposible no quedarme despierta esa noche pensando en todo lo que pasó con el y en un arranque de sinceridad tuve que reconocer ante mi misma que con el fui una verdadera bruja. No me porte bien con el, y el era un chico fantastico.
.
Es un chico fantastico. Tanto que al dia siguiente se presentó en la puerta de mi casa y me dijo que el sabia lo que necesitaba en estos momentos. Y desde ese dia me lleva a correr a la playa a la caida del sol. Por supuesto que cuando me deja en casa siempre me dice: todo mejorará.
.